Los dirigidos por Diego Placente terminaron a los golpes con sus pares ecuatorianos en un partido preparatorio para el Sudamericano de la categoría.
Lo que debía ser un partido amistoso entre las selecciones Sub-15 de Argentina y Ecuador terminó en un verdadero escándalo, con una batalla campal que dejó imágenes preocupantes. El encuentro, que se disputaba en el estadio George Capwell de Emelec como preparación para el Sudamericano Sub-15, finalizó en una trifulca entre jugadores de ambos equipos tras la derrota 1-0 de los dirigidos por Diego Placente.
Todo comenzó con una acalorada discusión entre los juveniles de ambos equipos una vez finalizado el partido. Un empujón desató la pelea, que incluyó trompadas, agarrones y hasta un jugador ecuatoriano utilizando el banderín de córner como si fuera una lanza. Las escenas, que fueron capturadas por las cámaras y rápidamente se viralizaron, mostraron la intensidad del enfrentamiento, en el que ni los entrenadores ni los agentes de seguridad lograron contener de inmediato a los futbolistas.
El técnico Diego Placente, junto con su par ecuatoriano, intentó intervenir para calmar la situación, pero el conflicto continuó por varios minutos antes de que los ánimos se apaciguaran. Aunque el partido comenzó con normalidad y buenos términos, incluyendo un intercambio protocolar entre las autoridades de ambas federaciones, el desenlace dejó una amarga imagen en este amistoso de cara al Sudamericano Sub-15, donde ambos equipos compartirán grupo.
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