El Xeneize, que jugó con diez casi todo el partido, perdió por 2-1 en los noventa minutos y luego cayó en la definición desde los doce pasos.
Boca mostró una gran personalidad para llevar el encuentro hasta las últimas instancias, luego de sobrellevar un trámite de partido adverso por la expulsión temprana de Luis Advíncula y los dos goles de Cruzeiro en 11 minutos que dieron vuelta la eliminatoria en un suspiro.
El descuento convertido por Milton Giménez le dieron vida a la visita y, luego de ser superior en la parte final y aguantar los ataques rivales, llevó la historia a los tiros desde los doce pasos.
En ese momento, se destacó la eficacia de los primeros nueve ejecutantes con disparos potentes a la red hasta que llegó el turno de Miguel Merentiel.
El atacante arrojó su intento por encima del travesaño y, con él, se esfumó el sueño de los dirigidos por Diego Martínez en el ámbito continental.
Mientras tanto, su rival avanzó a los cuartos de final, instancia en la que se enfrentará a Libertad de Paraguay.
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