El volante central, que sigue perteneciendo a Boca, no suma minutos en Atlético Nacional y sembró dudas sobre su continuidad con un posteo en redes.
Esperaba Jorman Campuzano que su salida de Boca sea la gran oportunidad para relanzar su carrera. Sin embargo, su presente en Atlético Nacional es complicado y reina la incertidumbre acerca de su futuro, ya que fue colgado y ni siquiera integra el banco de suplentes.
El volante central, que se marchó por la puerta del fondo de La Bombonera hace un par de meses pero sigue perteneciendo al Xeneize, quedó muy relegado en la consideración del técnico Efraín Juárez y hace ya cuatro partidos que no es convocado. Su última vez en cancha fue el 10 de octubre, en el empate 1-1 con Deportivo Cali.
Si bien disputó 11 encuentros como titular y hasta llevó la cinta de capitán, Campuzano fue perdiendo terreno y el posible detonante de este cambio pudo haber sido un incidente extradeportivo en el que él junto a otros cinco jugadores habrían participado en una reunión polémica. Varios de los involucrados fueron sancionados, pero ex Boca fue el único que no volvió a ser llamado, dejando en evidencia un quiebre con el cuerpo técnico.
A través de sus redes sociales, el mediocampista publicó un mensaje misterioso con emojis de un tren, una cara en silencio y un reloj de arena, lo que dejó espacio para interpretaciones. El posteo surgió poco después de que se confirmara su exclusión del plantel para el último compromiso ante Fortaleza, lo que despertó rumores sobre su continuidad en Medellín. Aunque su contrato en el Verde paisa se extiende hasta junio de 2025, la falta de oportunidades podría acelerar su salida.
Tiempo atrás, Campuzano se había vuelto a poner la camiseta azul y oro (con la que disputó 126 partidos y marcó dos goles) luego de una breve etapa en Giresunspor de Turquía, y si bien el entrenador Jorge Almirón solicitó su regreso, la competencia con jugadores jóvenes como Alan Varela, Cristian Medina y Equi Fernández complicó su permanencia en el once titular. Sin chances con Diego Martínez, decidió buscar regularidad en Atlético Nacional a mediados de 2024, club donde había comenzado su salto profesional hacia el fútbol argentino en 2019.
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